Cuando vengas a buscarme
estaré dormida
entregada, blanda, iluminada.
olvidada de mi sobre la arena.
Pero no te confundas: no te espero.
Fluyo, discurro,
destilo escamas de sal,
me voy despojando,
secando el grito,
reacomodando el tiempo.
01 noviembre, 2010 | |
Sobre la arena
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