05 mayo, 2010 | |

Sea
















Repetiré tu nombre
como oración pagana
mientras deshago mi trampa
de sábanas limpias.

Después,
pediré a los dioses amigos
olvidar tu cara
en el fondo del vaso.

Y cuando afuera aturda la sirena
uno de los dos
habrá abandonado el juego.

0 comentarios: